Cascada del Campillo
Dirección
Cascada del Campillo
GPS
40.7964822, -2.1662962
Cascada del Campillo
La Cascada del Campillo es una preciosa caída permanente de las aguas del Arroyo del Campillo hacia el río Tajo. Para entender mejor la formación de esta curiosa cascada y el edificio donde se emplaza debemos comprender mejor lo que implica la karstificación y los terrenos sobre los que se asienta.
La karstificación es un proceso químico que produce reacciones sobre la roca calcárea en su contacto con el agua y cuyo resultado final son los travertinos o tobas. En ellas a menudo es posible observar restos de las hojas, musgos o troncos sobre los que se precipitó el carbonato cálcico responsable de su formación.
La erosión en este tipo de sustratos es mucho más caprichosa que la pura fricción del agua y puede dar lugar a curiosas formaciones como cuevas, agujeros, tajos o barrancos, que se completan con hundimientos del terreno. El cauce de un río sobre este tipo de rocas suele generar importantes gargantas y desfiladeros que ofrecen paisajes espectaculares. En otras ocasiones, ayudadas por la erosión producida por el viento y el hielo dibujan bellas esculturas naturales.
Cuando el curso del agua encuentra importantes desniveles puede socavar la roca, teniendo como resultado cascadas, como ocurre en la cascada del Campillo. El arroyo que se precipita por ésta, con un alto contenido en cal, es el protagonista de la formación del edificio tobáceo del Campillo, el segundo más grande de Europa
<< ¿Cómo llegar?
Esta cascada actualmente queda un poco escondida, ya que vierte sus aguas hacia el cauce del Tajo, una vez pasada la amplitud del Puente de San Pedro y cuando ya ha comenzado a encañonarse de nuevo. La forma más cómoda de visitarla es mediante la etapa 6 del GR 113, pero si no deseamos hacer un sendero lineal nosotros recomendamos acercarnos lo máximo a las Casas del Campillo con nuestro vehículo, por un camino que se toma entre los kilómetros 62 y 63 de la CM-2015. Iremos paralelos a un arroyo por una muy estrecha pista hormigonada hasta que lleguemos a la primera construcción donde dejaremos el vehículo.
Desde aquí haremos una pequeña senda que nos lleva por la parte trasera del edificio del campillo para, súbitamente, bajarnos hasta una presa en el cauce del río Tajo el cuál cruzaremos por una pasarela. A un lado el río embalsado, al otro una pequeña y brillante poza de aguas cristalinas. Tras superar el puente sobre el Tajo, un cartel avisa de la peligrosidad del sendero en este tramo. El camino se estrecha y asciende por una pedregosa ladera dejando el río, al principio, a mano derecha. Poco a poco el sendero va ganando altura y se aleja del cauce.
Una vez alcanzada una buena altura, las vistas del río y de la cascada son espectaculares, sobre todo, desde algunos miradores naturales que se asoman al barranco. Nos quedamos justo enfrente de la cascada viendo como precipita sus puras aguas, hoy en día de manera totalmente opuesta a la que lo hacía cuando propició la formación del edificio tobáceo que la acoge.
Otra de las opciones para visitarla es partir con el coche desde el Puente de San Pedro, con dirección a Villar de Cobeta, y en una curva de la carretera, veremos una explanada con un cartel del GR-113, aquí dejaremos el coche y caminaremos siguiendo las señales del GR, hasta llegar justo al mismo punto de la opción anterior, justo enfrente de la Cascada del Campillo.