En pleno corazón del Parque Natural del Alto Tajo, uno de los espacios naturales más valiosos de España, nos encontramos ante una situación que roza lo inverosímil: a las puertas de 2025, la Mancomunidad de Municipios Río Gallo sigue sin proporcionar servicios básicos de reciclaje a sus habitantes.
Una mancomunidad sin servicios completos de reciclaje
La Mancomunidad, encargada de la recogida y tratamiento de residuos sólidos urbanos (RSU), da servicio a una extensa red de municipios que incluye:
- Anquela del Ducado
- Cobeta
- Corduente
- Fuembellida
- Herrería
- Huertahernando
- Olmeda de Cobeta
- Rillo de Gallo
- Selas
- Tierzo
- Valhermoso
Además de las pedanías de Corduente:
- Aragoncillo
- Canales de Molina
- Castellote
- Cuevas Labradas
- Lebrancón
- Teroleja
- Terraza
- Torete
- Valsalobre
- Ventosa
En total, hablamos de 21 núcleos de población que, a día de hoy, solo cuentan con contenedores de vidrio y resto, mientras que la recogida selectiva de papel y envases brilla por su ausencia.
El contraste con municipios vecinos
La situación resulta especialmente frustrante cuando observamos el progreso de municipios vecinos como Mazarete, que no solo cuentan con recogida selectiva completa, sino que han dado un paso más allá implementando la separación de residuos orgánicos. Esta disparidad en los servicios básicos de reciclaje pone de manifiesto una gestión desigual y obsoleta en nuestra mancomunidad.
La voz ciudadana ignorada
El año pasado, los vecinos de la zona, conscientes de esta carencia, organizaron una recogida de firmas que consiguió un respaldo significativo. Sin embargo, hasta la fecha, esta iniciativa ciudadana parece haber caído en saco roto, sin respuesta alguna por parte de las autoridades competentes.
Turismo sostenible en entredicho
La ironía de la situación alcanza su punto álgido cuando consideramos que nos encontramos en un entorno privilegiado, declarado Parque Natural. La zona está experimentando un auge significativo en el sector turístico, especialmente en el ámbito del turismo de naturaleza. Cada vez más visitantes eligen nuestros municipios buscando experiencias sostenibles y respetuosas con el medio ambiente.
Sin embargo, ¿qué mensaje transmitimos cuando estos turistas, comprometidos con la sostenibilidad, descubren que no pueden reciclar sus residuos adecuadamente? ¿Cómo explicamos que en un espacio natural protegido, todos los residuos, excepto el vidrio, acaben mezclados en el contenedor de resto?
Un llamamiento a la acción
Es momento de que las autoridades de la Mancomunidad Río Gallo tomen cartas en el asunto y actualicen sus servicios de gestión de residuos al siglo XXI. No podemos seguir promocionando un turismo sostenible mientras nuestras infraestructuras básicas contradicen los principios más elementales de la gestión ambiental.
La implementación de un sistema completo de reciclaje no es un lujo, sino una necesidad urgente que:
- Contribuiría a la conservación del entorno natural
- Mejoraría la imagen de nuestros municipios como destinos sostenibles
- Facilitaría el cumplimiento de las normativas ambientales vigentes
- Respondería a las demandas de vecinos y visitantes
Es hora de que la Mancomunidad Río Gallo escuche a sus ciudadanos y actúe en consecuencia. El futuro de nuestro entorno natural y el desarrollo sostenible de nuestra comarca no pueden esperar más.