Laguna de Taravilla
Laguna tobacea al lado del Salto Poveda
Dirección
Taravilla
GPS
40.665598029486, -1.9528582940056
Laguna de Taravilla
Esta hermosa laguna que se encuentra en la localidad de Taravilla, se formó gracias al crecimiento de una barrera de toba que represa el agua. Aunque un arroyo aporta caudal, la mayoría de su alimentación proviene de agua subterránea, es decir, de manantiales cercanos a la propia laguna o incluso situados en su interior.
Los cambios aparentemente inexplicables del caudal de la laguna de Taravilla, que han alimentado leyendas desde tiempos inmemoriales, se deben a que el aporte subterráneo no responde de manera inmediata a las lluvias. Así, desde que llueve y el agua se infiltra en el subsuelo hasta que aflora en la laguna pasa algún tiempo, lo que que hace difícil relacionar las lluvias con el aumento de su caudal.
La Laguna está represada por una barrera de toba de 175 metros de longitud y unos 75 metros de ancho. Con una altura de 30 metros, que hace de presa natural, ya que impide que el arroyo descargue su caudal directamente en el Tajo. Sólo en época de lluvias intensas la laguna rebosa sobre su represa, formando una bonita cascada.
Gracias a que las tobas y los restos orgánicos contenidos en ellas pueden ser datados mediante complejas técnicas isotópicas como el Carbono 14, se puede saber que la barrera se formó hace alrededor de 11.000 años, pero también que aunque actualmente está inactiva, excepto en un extremo y en época de lluvias, hace tan solo 200 años la barrera formaba una increíble cascada cubierta de musgos, parecida al cercano Salto de Poveda, pero mucho más grande y de origen natural.
Además, esconde una gran cantidad de interesantes curiosidades. Los sedimentos que se acumulan en su fondo han registrado con gran precisión los cambios ambientales y climáticos de los últimos dos mil años. Estos limos y arcillas contienen partículas minerales, granos de polen y diminutos fósiles de organismos que vivieron en las aguas de la laguna que, como si de la caja negra de un avión se tratara, reflejan la evolución de la zona con bastante precisión. Incluso si se conservan bien los sedimentos del fondo de la laguna de Taravilla, es posible estimar la cantidad de lluvia anual para los últimos 400 años.
Por último, otra particularidad de esta laguna es que si se encontrara vacía se podrían distinguir unos bordes muy abruptos y un fondo sorprendentemente plano. Esto es debido a que la depresión que ocupa la laguna se generó como resultado de la disolución de las rocas calcáreas que forman su
entorno. Así, posiblemente, primero se generó una cueva cuyo techo se desplomó, dando lugar a una cubeta que fue rellenada por el agua.
La laguna está situada en el Cañón del río Tajo a media altura de la ladera de su margen derecha, protegida del viento norte y con buena insolación, por lo disfruta de unas condiciones climáticas favorables que han propiciado el desarrollo en su entorno de un ecosistema de enorme riqueza.
Para acceder a ella, debemos tomar el camino que sale junto al área recreativa huerta del forestal de Taravilla, desde aquí ascenderemos poco a poco para al final alcanzar la depresión donde se sitúa la laguna tras haber recorrido unos 5 kilómetros. Desde Peralejos de las Truchas, tomaremos la pista que sale junto al puente del martinete, la que poco a poco se adentra en el cañón siguiendo el cauce del río Tajo, desde aquí estamos a unos 10 kilómetros de la Laguna de Taravilla.